SOBRE LA CONSTRUCCIÓN CIVIL Y LA ECOLOGÍA

Esta técnica de construcción que estamos implementando no es ni pretende ser la solución definitiva del déficit habitacional  que viven los países subdesarrollados. Simplemente nos proponemos utilizar materiales descartados por la industria y el alto consumo de la población, estimulados por el marketing internacional apelando inclusive a las nuevas marcas de bebidas cola proponiendo soluciones “saludables” y alternativas para la población, cuando en realidad no pasan de venenos embotellados en plástico y de relativo bajo costo para las mesas más humildes. (ver http://latribualimentacionsaludable.blogspot.com/search/label/aspartamo)

Lamentablemente la arquitectura es una más de las profesiones que no están al servicio de los sectores menos favorecidos de la sociedad. Se prepara los arquitectos para ser muy hábiles, muy expertos con la plancheta y el lápiz, siendo que la mayoría de ellos no sabe como se coloca un ladrillo sobre otro. Hemos recibido muchas preguntas por parte de ese sector, nos llama mucho la atención que la mayoría de ellos no pretendan como mínimo implementar esa técnica para experimentar como es que funciona. Pretenden que desde aquí les demos todo masticado, y si es posible hasta digerido. La idea no es esa. La idea es que, incluyendo el PET, utilizarse de productos o elementos existentes en la región, vistos como basura, sobras, descartes, o hasta elementos naturales como la caña, tacuara, bambú, barro, arena, arcilla, aserrín, estiércol, paja, y hasta inclusive fibra de cocoteros.

La crítica que lamentablemente tenemos que hacer probablemente no incluya algunos, que lamentablemente son la minoría. La gran mayoría de los arquitectos le tiene mucho miedo a las herramientas, en meter la mano en la masa, a involucrarse y envolverse en el proceso concreto de la construcción. Tal vez sea para mantener su estatus de su condición social y no tener que pagar más una consulta a la manicura. “El ser humano es lo que hace, no lo que dice que hace”. Continuaremos insistiendo en varios conceptos que modificaría la relación con aquellas cosas que descartamos. La basura sólo es basura cuando la descartamos indiscriminadamente sin envolvernos desde una condición ideológica. Es la ideología que hará con que este nuestro querido planeta vuelva a ser más saludable para la condición humana. Siempre que haya sectores cuya ideología sea la económica, estaremos simplemente siendo idiotas útiles. Es por eso que apelamos a todos los profesionales, en este caso de la construcción, a que hagamos un análisis de conciencia para de esa forma ver de que manera damos vuelta a esta tortilla. Tal vez algunos de nuestros colegas arquitectos se sientan ofendidos con nuestra postura, no ha sido esa la intención. Simplemente hemos perdido la mirada ingenua y observamos al mundo tal cual lo vemos nosotros desde nuestra ideología. En algún otro momento le tocará a la medicina, a la ingeniería, a la abogacía, a la docencia… Seguimos esperando sumar esfuerzos. Abraziclados!
Hugo Peña

La Tribu (http://casadebotellasdepet.blogspot.com)