Creemos que el habitat es el lugar más importante para todos los seres vivos, pero más que nada para todos los hombres, mujeres y sus familias.
Se puede perder la salud, el trabajo, muchas otras cosas. Si se tiene la casa la vida puede continuar.
La vida social, laboral, estudio y otras suceden fuera de casa pero es de casa que nos organizamos para eso. En casa es donde suceden las ceremonias más intimas, es el lugar desde donde se planea la vida, y donde se descansa de ella. Es por no tener una casa que muchas familias no se formalizan.
La casa no es solo un lugar donde las personas se abrigan, se alimentan, se procrean. Es también a donde se regresa después del trabajo o el estudio.
Nos proponemos a través de ustedes a divulgar y enseñar nuestra técnica de autoconstrucción mediante talleres en cada barrio, en cada localidad. Donde la precariedad de las viviendas y el déficit de estas sea más urgente de ser resuelto. Los costos de construir con esa técnica son bajisimos en relación a los métodos tradicionales.
Sabemos que en la construcción de una casa intervienen muchos itens y que muchas veces esto encarece la obra. Por otro lado también sabemos que un plan de viviendas moviliza muchas industrias tales como aberturas, caños, vidrios, cables, chapas, maderas, ceramicas, pinturas, etc. Economizando en paredes cerca de 70% podemos aspirar construir más viviendas para más gente. Dar más trabajo directo e indirecto. Mucha gente trabajando, menos desocupación, más felicidad, menos violencia. Más infraestructura, menos enfermedad. Menos hacinamiento, más intimidad.
Es por eso que convocamos a todas las personas de corazón abierto a que nos ayuden a divulgar esa técnica.
Hugo Peña